La misión de COVIDE-AMVE (cooperación vicenciana para el desarrollo-acción misionera vicenciana de España) es trabajar por el desarrollo integral de los más pobres en todo el mundo, luchar contra el hambre, el subdesarrollo y la falta de instrucción y trabajar para erradicar las causas estructurales que las producen: la injusticia, el desigual reparto de los bienes y las oportunidades entre las personas y los pueblos, la ignorancia, los prejuicios, la insolidaridad, la indiferencia y la crisis de valores humanos y cristianos; trabajamos por eliminar la pobreza extrema a través de proyectos de desarrollo y costeando becas de apadrinamiento.
Nuestra visión, cuyo fundamento es el Evangelio, vivido al estilo de nuestros Fundadores San Vicente de Paúl y Santa Luisa de Marillac y la Doctrina Social de la Iglesia: es conseguir el desarrollo integral de todas las personas, promoviendo sus capacidades, potenciando sus logros mediante un estilo de trabajo profesional, coherente, cercano, creativo y audaz que procure a cada hombre y mujer las herramientas necesarias para transformar su propia realidad y la de su entorno, generando una sociedad más justa e igualitaria. Y desde nuestra cercanía y entrega incondicional nuestro servicio vivido de acuerdo con las virtudes recomendadas por nuestros Fundadores: dulzura, cordialidad, comprensión, respeto y devoción que es la savia que revitaliza constantemente nuestra identidad.
Los valores que se transmiten, en el trabajo diario del voluntariado, cuando se vive desde el Carisma Vicenciano son los siguientes:
- La Dignidad Humana: que implica: reconocer el valor de la persona en todas las dimensiones de su ser; ver en los que sufren a hijos de Dios, a hermanos/as de quienes son solidarias y pronunciarse abiertamente por el respeto y la defensa de la vida humana y por el derecho a la paz para todos los pueblos y todas las naciones.
- La Justicia: comprometerse es trabajar en el plano social para cambiar las estructuras injustas que engendran pobreza y marginación; es denunciar las situaciones que explotan y excluyen a las personas, así como respetar sus situaciones particulares y colaborar con los que defienden sus derechos.
- La Solidaridad: es compartir lo que son y lo que tienen, en cercanía con los más necesitados, como expresión de la fraternidad universal, buscando con ellos soluciones y transmitir espíritu de superación desde el convencimiento de que los bienes de la tierra constituyen un patrimonio común para todos los seres humanos.
- Creatividad y audacia: Es una exigencia de fidelidad al espíritu de los Fundadores el responder permanentemente con creatividad y valentía ante los cambios de los tiempos, para dar respuesta a las necesidades de los más desfavorecidos.
- La Gratuidad: poner al servicio de sus hermanos/as, su persona, talentos, tiempo, trabajo sin esperar nada a cambio.
- Disponibilidad: estar dispuestas y ágiles para responder donde se les necesite, superando los intereses propios, en aras del bien común.
- Profesionalidad y formación: apostar por la calidad humana. La competencia profesional y técnica y el compromiso con los más débiles. La formación es una cuestión de justicia personal y social.
- Humanización y técnica: en un servicio integral, esforzarse por humanizar la técnica, haciendo de ella vehículo de la ternura de Cristo.