En estos últimos días hemos tenido la suerte de hacernos presentes en el webinar realizado por la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional (AACI), en la mesa de experiencias y diálogo propuesta por ONU-HABITAT y, próximamente, en el I Congreso Andaluz de Cooperación Internacional promovido por el Consejo Andaluz de Colegios de Médicos. Todos ellos nos facilitan formación e información que completa lo ya proyectado desde el Proyecto de Sensibilización: ¿Y si hubieras nacido allí? que COVIDE-AMVE en la Provincia España-Sur ha puesto en marcha junto a la colaboración del Ayuntamiento de Cádiz.

Nuestro Proyecto de Sensibilización: “¿Y si hubieras nacido allí?”, se gestó en pleno periodo de Estado de Alarma, a raíz de la inseguridad y desbordamiento en necesidades básicas que se estaban viviendo en nuestro país, con la intención de hacer reflexionar sobre las diferencias de promoción personal y acceso a recursos básicos que poseen las personas según el lugar del planeta y la clase social a la que pertenezcan.

La situación actual de la pandemia COVID-19 está poniendo de manifiesto las limitaciones humanas que durante mucho tiempo hemos conseguido enmascarar, ocultar y apartar de nuestras vistas porque así vivíamos más cómodos en nuestra propia fantasía de un mundo perfecto y feliz.

Las grandes carencias de las poblaciones más desfavorecidas nos hacen, ahora, en esta realidad, plantearnos nuevas formas de ESTAR y SER en este mundo. Nos hacen ver la vulnerabilidad de nuestra realidad social y la caducidad y precariedad de tantas cosas a las que les hemos dado valor sin merecerlo, sin ser imprescindibles, sin ser importantes. Enseñándonos valores como la cercanía, la salud, la familia, la seguridad, la intimidad, el espacio personal, la vivienda familiar, el sentido de comunidad, el acceso a la alimentación, a la educación,… como tantos otros, por los que más de la mitad de la población mundial lucha por conseguir cada día.

La Agenda 2030 aprobada en 2015 por los 193 estados miembros de las Naciones Unidas, junto con muchas acciones en favor del desarrollo de los pueblos realizadas por múltiples ONGs como la nuestra, han sido y serán la voz de ese punto de unión que ahora encontramos, donde, al final, nadie es más que nadie, ni nadie mejor que nadie, sino que lo importante es que “NADIE SE QUEDE ATRÁS” porque en cualquier momento todos somos vulnerables y todos necesitamos de otros. Desde esta perspectiva se están dando numerosos encuentros, como los mencionados al principio, entre entidades gubernamentales nacionales e internacionales y ONGs que están vislumbrando las consecuencias de esta pandemia mundial. Siendo tal su manifestación que, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) presentados en la Agenda 2030, ya no son los objetivos que nos proponemos a conseguir para otros; sino los objetivos que entre todos debemos conseguir para que todos podamos vivir bien y dignamente, porque incluso aquí, en el denominado primer mundo, el acceso a la sanidad, a la salud, a la vivienda, al trabajo digno,… ya, se está viendo comprometido.