Antes de hablar de nuestro proyecto, es oportuno que nos presentemos.

La Familia San Pablo está formada por un grupo de 50 residentes, acompañados de una Comunidad de Hijas de la Caridad y el personal que nos atiende. Desde nuestras “diferentes capacidades” somos expertos en acoger al otro, en amar, en sonreír y gozar con lo que tenemos y desde aquí compartimos nuestro pequeño grano de arena.

Estamos en el C.A. San Pablo y San Lázaro en Mondoñedo (Lugo) y las pasadas navidades quisimos compartir ilusión, entusiasmo, ganas de luchar por una vida mejor y un poco de nuestros ahorros ayudando a un niño de la misión de Bebalem (Chad).

“Navidad Solidaria” ha sido el eslogan que nos ha impulsado en esta aventura. Comenzamos en septiembre con unas jornadas de sensibilización trabajando el cuento: “El sueño del céntimo viajero”. Nos permitió tomar conciencia del valor de lo pequeño, un céntimo por ejemplo, el valor de los pequeños gestos tan necesarios y que pueden hacer grandes cosas. Nos dimos cuenta que siempre hay alguien que tiene menos que nosotros o carece de cosas de las que nosotros ya disfrutamos y de las que ni somos conscientes de ello como poder andar, moverte con libertad y autonomía… Esto nos impulsó a hacer algo por los demás.

Nos pusimos en contacto con la Comunidad de Hijas de la Caridad de la misión de Bebalem. Nos sugirieron ayudar a un niño que precisaba de una prótesis para poder caminar y necesitaba el dinero para poder pagar la operación.

¡Manos a la obra! Somos un buen grupo y cada uno, de forma voluntaria, pudo aportar su “céntimo”, su grano de arena, sus deseos de ayudar y entre todos… ¡EUREKA! Conseguimos recaudar lo necesario para que nuestro amigo de Bebalem, que ya es de nuestra gran familia, pueda caminar, moverse con autonomía y pueda ir a la escuela.

Seguiremos viajando y soñando como el céntimo viajero. Sigue habiendo mucho que hacer y seguiremos aportando nuestro granito de arena en la medida de nuestras posibilidades.

Familia San Pablo